Desde el fondo de los tiempos una intuición respecto de la mujer pervive tanto en la argumentación moderna como en los lenguajes de que se vale; el pasado acecha. En la era de la telecomunicación masiva circulan profusamente por los buzones y sitios electrónicos tesis tales como (ejemplos tomados de un correo electrónico): En castellano se debe emplear el plural masculino cuando la diversidad a la que se hace referencia incluya individuos de ambos sexos, y es innecesario e incorrecto desglosarlo cuando los términos masculino y femenino sean iguales , como ocurre con "mexicanos y mexicanas" o con "chiquillos y chiquillas". Aunque sea una mujer quien asume una presidencia, es académicamente inadmisible emplear el término "presidenta" en sustitución de "presidente", tomando en cuenta que ente es a la vez el participio activo del verbo ser y sufijo de otros verbos para denotar el ejercicio de la acción; en el caso de presidir , la persona que ej...
¡Cuánto dicho parece joya al instante y espanta tras la reflexión...! ¿Qué implican esas dulces creencias?